Durante el resto de la década de los noventa, y tras el éxito de los de Calvin Klein, continúa dirigiendo anuncios de perfumes. Por desgracia el nivel de estos es bastante desigual.
En 1992 dirige dos spots. El primeroes el de Opium de Yves Saint Laurent, un perfume inspierado en Oriente y que siempre están cargadas de polémica por la alta carga sexual que tienen. En mi opinión un anuncio que entre otros pasaría sin pena ni gloria (y de hecho es de los más flojos de este perfume), pero que en el nivel general de hoy acaba por sobresalir.
El siguiente encargo es de Giorgio Armani, que lo llama personalmente para preguntarle si le interesaría trabajar con él para la presentación de su nuevo perfume. Lynch, en un alarde de originalidad (ver el post anterior) le envía un poema, y a Giorgio le encanta la idea, y le da total libertad creativa (como Lynch ha confesado posteriormente).En el anuncio juega con la identidad de una mujer acosada por la fama y sus aledaños.
En 1993, dirigió a su entonces pareja Isabella Rossellini para la campaña de Trésor de Lancôme. El anuncio lo habreis visto un millón de veces, pero de este tampoco hay vídeo... (siempre falta uno, pero ya sabeis que puede aparecer a lo largo del día como ocurrió ayer). Edito: ¡APARECIÓ!
Y ahora la traca final. En 1994 Karly le encarga el spot para su nuevo perfume: Sun Moon Stars, que estará protagonizado por Daryl Hannah. Agarraos que es muy fuerte.
Yo estoy medicandome desde que lo he visto.
Ante estos trabajos, y sobre todo este último solo puedo pensar que tenía muchas facturas que pagar, porque sino no me lo explico. Porque en esa época su carrera cinematográfica está un poco parada pero hace también vídeos músicales como este de Massive Attack para su canción Unfinished sympathy
que estais jartitos de oir aquí
(esto era para hacerme perdonar por lo de Karly)
Y mañana Gucci by Gucci.
0 Response to 'Los perfumes de David Lynch (2ª parte)'
Post a Comment